Al cumplirse años del genocidio injustificado, es bueno traer a la mente de nuestros alumnos el recuerdo de un capítulo de la historia que pudo haber sido diferente, pero que es preciso revisar para que juntos construyamos una cultura para la paz
sábado, 6 de agosto de 2011
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1 comentario:
Buenas.
Aunque sea la excepción, por una vez convengo en el titular de la entrada. El problema es que cabría profundizar más, como suele hacerse a propósito de los alemanes y sus circunstancias. Por ejemplo cabría interrogarse por qué en la pantomima Nuremberg se enjuició a los alemanes por causas diversas y, sin embargo, nunca figuraron los bombardeos sobre las ciudades entre las causas. Y he aquí que a este respecto los Aliados, los buenos, los que contaron la Historia como les vino en la real gana, tenían mucho que confesar como el uso de sustancias ilegales en sus bombas (fósforo blanco, sustancia devastadora provocando incendios), el bombardeo de ciudades abiertas, las masacres de Hamburgo o Dresden, o los mismos ataques sobre Hiroshima y Nagasaki con un Japón colapsado y negociando ya la rendición. Así funciona la Historia, pero esas cuestiones parece que no interesa profundizar en ellas so pretexto de que los buenos lo sigan pareciendo.
Un saludo
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